La comisión de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ha aprobado por unanimidad la proposición no de ley (PNL) socialista, tras la aprobación de un enmienda del PP, donde se insta a la Junta de Castilla y León a continuar y hacer efectivo el plan de monitorización del estado de conservación de la biodiversidad de Castilla y León para realizar la mejor evaluación posible del estado de la población de águila perdicera presentes en la Comunidad y específicamente  en el noreste de la provincia de Burgos.

La procuradora socialista, Virginia Jiménez, ha explicado que en un segundo punto del texto también se exige a la Junta “reforzar las medidas que aseguren la protección de esta especie en el noreste de Burgos”.

Este ave, incluido en el Catálogo Español de Especies Amenazadas dentro de la categoría de ‘vulnerable’. Desde los años 70 se ha producido un descenso de entre el 70% y el 80% en la población de este ave en Castilla y León; dejando en la actualidad solo algunas parejas identificadas en Salamanca, Zamora y Burgos; ubicada en Valverde de Miranda. 

Jímenez ha reprochado a los representantes del gobierno autonómico que las medidas que se están realizando hasta ahora “no están dando resultado ninguno. Es una obligación de la administración regional luchar por la recuperación del águila perdicera, como si se está haciendo en otra comunidades como Álava con unos resultados muy favorables”.