El Partido Popular se ha quedado solo en el rechazo a la propuesta socialista para que la Diputación colabore con los pueblos implicados en el mantenimiento y conservación de las vías verdes (Caminos naturales) que discurren por la plataforma del ferrocarril Santander-Mediterráneo de la provincia, e impulsar su desarrollo.

Así se ha posicionado en el Pleno de diciembre, en el que la diputada provincial socialista Purificación Rueda ha defendido la proposición de su grupo para que la Institución provincial elaborara un plan de actuación con medidas técnicas y económicas para liberar a los ayuntamientos de los gastos de conservación. El Partido Popular, que gobierna con mayoría absoluta, se ha cerrado en banda, incluso a la transacional que ha propuesto Vox y ha recogido el PSOE para articular esas ayudas vía convenio, pero los populares querían derivar la responsabilidad al Gobierno, aun a sabiendas de que la competencia es de la Diputación Provincial.

 

Con el no a la proposición del PSOE, el equipo de gobierno de la Diputación (PP), cierra la puerta, además, a desarrollar un proyecto turístico con todas las vías verdes existentes en la provincia, la conectividad entre ellas y con los pueblos para posicionarlos como destino atractivo, tal y como planteaba la moción.

El Gobierno, dentro del Programa Caminos Naturales, ha acondicionado desde el año 1993 casi 10.600 kilómetros de infraestructura para uso recreativo, turístico y medioambiental a lo largo de toda la geografía española. Dentro de esa inversión, se engloba el corredor de unos 566 kilómetros, con un itinerario especialmente diseñado para peatones y ciclistas, basado en el acondicionamiento de las antiguas líneas del ferrocarril Santander-Mediterráneo que pretendían conectar Santander con la costa Mediterránea en Sagunto (Valencia).

 

En la provincia de Burgos esta red del Camino Natural Santander-Mediterráneo, con siete tramos, suma más de 180 kilómetros y discurre por terrenos de numerosas localidades. La inversión estatal destinada a su acondicionamiento supera los 10 millones de euros hasta la fecha.

Los caminos naturales suponen una oportunidad única para impulsar el turismo sostenible en la provincia, generando empleo y riqueza en las comarcas por las que discurren. Además, contribuyen a diversificar la actividad económica, potenciando la oferta turística, al tiempo que contribuyen a la conservación de los espacios naturales. También tienen como finalidad favorecer la conservación del patrimonio cultural y tradicional.

 

Sin embargo, el potencial turístico que tenemos en nuestra provincia  contrasta con los escasos recursos de la mayoría de los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes a los que, en muchos casos, les resulta excesivo el gasto para afrontar el mantenimiento de estos trazados en condiciones adecuadas para su uso.

Cabe recordar que el PP se interesó en el Senado en la pasada legislatura por el estado de deterioro  del tramo de la vía verde entre las proximidades de la capital burgalesa y Cascajares de la Sierra y el Gobierno recordó que los proyectos y las obras necesarias para el acondicionamiento de estos trazados y su ejecución no es responsabilidad del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y ADIF, sino de los ayuntamientos y/u organismos o entidades con los que éstos puedan contratar.

 

En marzo del año pasado, la Mancomunidad Sierra de la Demanda pudo licitar el arreglo integral de la ruta, de 52 kilómetros por 43.000 euros, el 60% con cargo a una subvención de la Diputación de Burgos, a través de una convocatoria de Sodebur para agrupaciones de municipios y mancomunidades.

 

Sin embargo, aunque el actual vicepresidente primero de la Diputación de Burgos, Ramiro Ibáñez, se abrió hace dos años a la posibilidad de buscar la forma para articular ayudas de la Institución provincial a las poblaciones con menos presupuesto, esta vía está aún pendiente de explorar en esta Administración.